Chile es uno de los países más centralizados de la OCDE

Identificar polos de crecimiento

• La descentralización implica el traspaso de competencias y recursos desde el Estado central a las distintas regiones y comunas del país.
  Según el Censo de 2017, los habitantes de la Región Metropolitana es de 6.061.185 habitantes, lo que representa el 40,1% de la población nacional.
  El desarrollo regional requiere de identificar los potenciales polos de crecimiento en las distintas zonas para generar independencia regional económica.
  Una de las leyes aprobadas con un enfoque regional fue el royalty minero. Según estimaciones del Gobierno, se repartirán US$ 450 millones en el 89% de las comunas más necesitadas del país.

40,1%
de la población chilena vive en santiago, según el censo de 2017.

Bajo marco institucional

La OCDE precisó que Chile aún carece de un marco institucional regional que pueda coordinar de mejor manera las diferentes políticas, instrumentos y actores que son parte del desarrollo económico.
“Muchas regiones tienen planes a 2030 o incluso 2040, pero eso requiere que a nivel de gobernación se puedan generar políticas públicas que sean coherentes con la identidad regional y esos elementos no están disponibles”, expresó el analista Guillermo Holzmann.

Desempeño comparado

Según datos de la OCDE, Chile es de los países más centralizados del bloque.
El gasto público subnacional, destinado a jurisdicacciones de Gobierno por debajo del nivel central, correspondió al 14,9% del gasto fiscal total, en contraste con el 28,8% del promedio de la organización en 2021, según la Dirección de Presupuesto.

Rol del gobernador

• Un hito importante en la descentralización del país ha sido la elección de gobernadores regionales a través del sufragio universal desde 2021, ya que antes el cargo era designado por el Presidente. Los gobernadores cuentan con recursos propios, que le son asignados en la Ley de Presupuestos. Sin embargo, las autoridades han planteado que no tienen suficiente personal para ejecutar los proyectos y sienten que su trabajo está restringido por la competencia con los delegados presidenciales.
  “Está en pañales, tenemos gobernadores que en virtud de sus atribuciones no pueden desarrollar políticas públicas a nivel regional que sean específicas”, comentó el analista Guillermo Holzmann.

Autonomía de gestión

Según una Asesoría Técnica Parlamentaria de Descentralización en Chile elaborada por Gabriela Dazarola, es necesario modificar la Constitución para dotar a los gobiernos regionales de autonomía de gestión. Otros focos están en la equidad de recursos para los distintos territorios. Dazarola apunta a crear un Fondo de Convergencia para la Equidad Interregional similar a la Unión Europea, además de implementar medidas para contar con capital humano calificado en las regiones.